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TURISMO

TURISMO EN GUADIX

 

-          Alcazaba.

La Alcazaba de Guadix destaca por las excelentes vistas que ofrecen sus torreones, desde los que se pueden contemplar las cuevas en una visión de conjunto. Data de los siglos X y XI y fue posteriormente ampliada en época nazarí. Ha sido declarada Monumento Nacional y destaca por su color rojizo. Como edificación con fines defensivos está formada por una gran muralla y diversas torres cuadradas y rectangulares.

Se puede visitar durante todo el día.

 

-          Catedral.

Preciosa joya construida entre los siglos XVI y XVIII en la que se fusionan los estilos renacentista puro y barroco. Fue edificada sobre la mezquita almohade y la antigua catedral gótica y es obra de Diego de Siloé, Gaspar Cayón y Vicente Acero. Está consagrada a la Encarnación del Virgen y su altar mayor está decorado con interesantes cuadros de la Virgen. Cuenta con un espectacular coro barroco tallado por Ruiz del Peral y con majestuosas columnas corintias y jónicas. Tiene tres fachadas dedicadas a la Anunciación, San Torcuato, patrón de Guadix, y Santiago Apóstol. Se estructura en 3 naves con ábside y girola. 
Alberga el museo catedralicio, donde se pueden contemplar piezas y objetos artísticos muy interesantes además de libros diversos de los siglos XV al XVIII. Junto a la catedral, está anexa la parroquia o Iglesia Sagrario, de fachada construida en estilo plateresco.

 

-          Barrio de cuevas.

Grupo de viviendas cavadas en la tierra, forman un original barrio que constituye una pequeña ciudad ‘troglodita’. Se crearon en un terreno arcilloso y blando a partir de la reconquista cristiana y la consiguiente búsqueda de residencia y cobijo por parte del pueblo morisco. Sus primeros núcleos fueron el cerro de San Marcos y la fuente de Maese Pedro. Actualmente, el barrio acoge a gran parte de la población accitana. Los miradores naturales de Cuatro Veredas y San Fandila ofrecen una espectacular visión del conjunto. Las cuevas se distribuyen de forma anárquica formando un arco este-sur-oeste. Como característica llamativa, son cuevas cálidas en invierno y frescas en verano. Están unidas por caminos y veredas de trayecto irregular.

 

-          Ermita de Fátima.

Esta ermita está enmarcada en la zona de las cuevas. La ermita de Fátima pasó a ser una parroquia tras ser edificada por el arquitecto Santa Teresa. Está situada en las inmediaciones de las Cuatro Veredas.

 

-          Museo Catedralicio:

Dentro de la catedral hay un museo, el cual contiene una importante colección de pinturas de la Virgen y una colección de libros de los siglos XV y XVIII.

 

-          Palacio de Peñaflor (XVII-XVIII):

Situado en la parte alta de la ciudad, estuvo habitado por aristocráticos españoles (los Marqueses de Peñaflor).

 

-          Plaza de las Palomas:

Bellísima Plaza Mayor porticada que data del siglo XVI y reestructurada después de la Guerra Civil Española al ser esta bombardeada. Es la plaza más antigua de la ciudad, allí se encuentra el Palacio Consistorial (Ayuntamiento).

 

TURISMO EN GRANADA.

 

-          La Alhambra.

La Alhambra, que fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1984, es una ciudad palatina situada sobre la colina de la Sabika, junto al río Darro. Su nombre procede del color de sus muros (Al-Hamra en árabe) que fueron fabricados con la propia arcilla del terreno, de ahí su color rojizo.

El complejo está formado por los jardines del Generalife, los Palacios Nazaríes y la Alcazaba, de construcción árabe. De factura cristiana encontramos el palacio de Carlos V y la iglesia de Santa María, construida sobre la antigua mezquita. Los Palacios Nazaríes están agrupados de forma irregular y las distintas estancias se comunican entre sí por patios o galerías.

Los orígenes de la Alhambra datan del siglo IX, cuando comenzó a utilizarse la Alcazaba como refugio. Fue en el siglo XIII cuando el primer monarca nazarí, Mohamed I, fijó su residencia real en ella. Su sucesor, Mohamed II, terminó el recinto amurallado. En el siglo XIV, con los reinados de Yusuf y Mohamed V, la Alhambra adquirirá su apariencia monumental y preciosista que conocemos hoy. Yusuf construyó el núcleo del Palacio de Comares, con la gran torre que se proyecta sobre la ciudad. El recinto interior del Palacio albergaba el trono del sultán, situado bajo la cubierta que representa el concepto del universo de Alá. Además, este monarca enriqueció el recinto con puertas monumentales, como la de las Armas (principal entrada a la Alhambra) o la de la Justicia.

Mohamed V, reformó el palacio de Comares, añadiéndole la espectacular fachada del patio del Cuarto Dorado. También construyó el innovador Palacio de los Leones, dejando de lado el modelo de palacio existente hasta ese momento y creando un nuevo modelo de estructura cuatripartita inspirada en los modelos orientales del Islam.

La Alhambra es un ejemplo sin igual de cómo la luz y el agua ofrecen importantes efectos decorativos a la arquitectura. Una cuidada elección de los materiales hace que su ornamentación cambie según la incidencia de la luz. El agua funciona a modo de espejo reflejando la arquitectura y los elementos decorativos, contribuyendo a una sensación de paz. Además, en combinación con la luz, origina composiciones ilusorias y suaviza la arquitectura horizontal, tal y como se puede apreciar en el Patio de los Arrayanes.

La Alhambra quedó abandonada en el siglo XVIII. Durante la dominación francesa parte de la fortaleza fue volada y hasta el siglo XIX no se comenzó su reparación, restauración y conservación, que aún se mantiene.

-          Albaicín.

El conjunto urbano conocido como Albaicín, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1984, incluye toda la colina comprendida entre la calle de Elvira, la Plaza Nueva y la Carrera del Darro hasta San Cristóbal. En la etapa islámica, el actual Albaicín era un conjunto de diferentes núcleos urbanos independientes y no fue hasta la era moderna cuando alcanzó su actual concepción unitaria. 
El Albaicín fue en su origen un núcleo que se extendía al nordeste de la Alcazaba Cadima (vieja). Existen varias versiones sobre el origen del topónimo Albaicín. La más aceptada es la que hace referencia a un vocablo árabe que designa al barrio de los halconeros. No fue hasta finales del siglo XV y principios del XVI cuando comienza a utilizarse el nombre indistintamente para referirse al pequeño arrabal original y a todo el conjunto urbanístico situado frente a la Alhambra. 
Pasear por el Albaicín es pasear por la historia de Granada. Sus construcciones, sus plazas y la propia estructura de sus calles permiten al visitante observador reconocer las diferentes transformaciones culturales y sociales de la ciudad.

-          Los Jardines del Generalife: Son los jardines del palacio. Los reyes solían pasar el verano en sus jardines, por el frescor de sus aguas y el susurro del agua brotando en cada esquina, lo convierte en el sitio más fresco y relajante del conjunto.

 

-          Catedral de Granada.

La Catedral de Granada está considerada como la primera iglesia renacentista de España y como uno de los mayores exponentes de este orden artístico. Los Reyes Católicos mandaron su construcción en 1492 y se proyectó, en principio, siguiendo el modelo gótico de la Catedral de Toledo.
En 1528 Diego de Siloé se hizo cargo del proyecto y diseñó una nueva planta del templo al estilo renacentista español. Casi doscientos años después, en 1704, se finalizaron las obras. De las dos torres ideadas por Siloé sólo se inició la construcción de una, paralizándose en 57 metros de altura en lugar de los 81 previstos inicialmente. La fachada principal es una obra maestra barroca realizada por Alonso Cano en 1667.

 

-          Capilla Real.

Los Reyes Católicos, que veían en Granada un símbolo de la unidad de España y el reino cristiano, mandaron construirla como lugar de reposo de sus restos mortales. Su construcción, en estilo gótico, se inició en 1506 y fue dedicada a los Santos Juanes: el Bautista y el Evangelista. Se finalizó en 1517 durante el reinado de Carlos V, quien también trasladó allí los restos de sus padres, Juana la Loca y Felipe el Hermoso.
La capilla es un ejemplo clave del gótico flamígero en período renacentista y sólo presenta una fachada exterior, al estar unida por sus otros tres lados con la Catedral, la Lonja de Mercaderes y el Sagrario. La bella fachada plateresca es obra de Juan García de Prada. De su interior podemos destacar la espléndida reja plateresca realizada por Bartolomé de Jaén, el retablo mayor, de estilo gótico, fechado en 1522, y los sepulcros reales tallados en mármol de Carrara. Bajo ellos se encuentra la cripta, con los féretros de plomo de los cuatro monarcas y el príncipe Miguel.
Actualmente, la entrada para visitar la Capilla Real se realiza a través de la antigua Lonja de Mercaderes. En ella se reunían y negociaban los comerciantes y financieros de la ciudad. Su construcción se inició en 1518, según los planos de Enrique Egas, aunque este no fue el proyecto que finalmente se llevó a cabo. La balconada gótica de la planta superior constituye uno de los elementos más atractivos del edificio.

 

-          Monasterio de la Cartuja: Su sacristía y altar mayor es uno de los mejores ejemplos del Barroco español.

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